Hoy vamos a enseñarte lo imprescindible que ver en Antibes, una encantadora ciudad de la icónica Riviera Francesa, con una gran animación y mucha historia.
Visitar Antibes es descubrir una antigua ciudad amurallada que acoge a un bonito casco histórico de estrechas calles adoquinadas, mercados provenzales y animados negocios. También fue el hogar de Pablo Picasso, y como vas a ver a continuación, te darás cuenta de que no tenía mal gusto.
No hay que dejar de lado que la localidad tiene bellísimas playas de arena dorada, con modernos edificios donde alojarse. Todo ello rodeado de un bellísimo paisaje un rocoso, salpicado de villas lujosas. Por todo eso, y mucho más, es un destino de referencia para viajeros de todo el mundo.
- Dónde está Antibes
- Dónde dormir
- Qué ver en Antibes
- Playa de Ponteil
- Bastión de San Andrés - Museo Arqueológico
- Paseo marítimo
- Murallas
- Castillo Grimaldi
- Torre Grimaldi
- Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción
- Rue Massena
- Playa de la Gravette
- Port Vauban
- Fort Carré
- Bastión Saint Jaume y le Nomade
- Chapelle Saint Bernardin
- Calles y rincones del centro
- Cap d'Antibes
- Vídeo
Dónde está Antibes
Como siempre, empezamos contándote la ubicación de Antibes, para que lo sitúes mentalmente en el mapa. La localidad está situada en el departamento de Alpes Marítimos, en la región Provenza-Alpes-Costa Azul de Francia. Es costera y se encuentra entre las glamurosas Cannes, y Niza.
Dónde dormir
Nos alojamos en el Josse Hotel, ubicado frente a la playa y el parque de Ponteil, una zona estupenda con una amplia zona para aparcar tu coche.
Todas las habitaciones tienen una bonita y luminosa decoración de estilo mediterráneo, cuentan con aire acondicionado y algunas, como la nuestra, tienen un balcón con vistas al mar o al jardín.
Si lo que necesitas es un apartamento, una buena opción es el Cosy Home, ubicado en una calle tranquila de Antibes a 400 metros del Museo Picasso y a 4 minutos a pie de la playa de Gravette. Cuenta con cocina bien equipada y baño privado.
Si no es eso lo que estás buscando, o están completos, hay muchos alojamientos en Antibes para que elijas. Pincha en el enlace.
Qué ver en Antibes
Lo principal que ver en Antibes se encuentra concentrado en el interior de la muralla y justo a su alrededor, por lo que recorrerlo todo es muy cómodo.
Para llegar a las playas tienes un bonito paseo por el que da gusto ir y donde las distancias parecen más cortas. Por lo que también puedes incluirlas en tu visita a Antibes.
Playa de Ponteil
Ya que nuestro hotel se encontraba frente a la playa de Ponteil, fue por donde comenzamos a descubrir todo lo que ver en Antibes. Esta, la playa de Salis y la de la Gravette, que luego veremos, son las más cercanas al casco histórico. Son su arena dorada, aguas cristalinas y tienen una maravillosa ubicación, lo que las hace muy populares.
Una de las mejores cosas que hacer en Antibes es ir a la playa. La Costa Azul es perfecta para disfrutar de baño y por supuesto el sol.
Bastión de San Andrés - Museo Arqueológico
Disfrutando del sol de primavera junto al Mar Mediterráneo, llegamos casi sin darnos cuenta al bastión de San Andrés, una fortificación militar diseñada por Vauban a finales del siglo XVII. (Hay un pueblecito en Bretaña que nos encanta, con una fortaleza diseñada también por Vauban, y que te recomendamos visitar: es Concarneau).
En su interior se encuentra el Museo Arqueológico Antibes desde 1963. Allí podrás ver restos de la ocupación grecorromana de la zona, arqueología subacuática y colecciones de numerosos naufragios.
Pero no es este el único bastión de la ciudad, a lo largo de nuestro paseo descubriremos más bastiones y un fuerte. Tan solo parte de las fortificaciones que la ciudad tenía y que a partir de 1860, tras la anexión del condado de Niza a Francia, el interés militar desapareció. El recinto poco a poco fue desmantelado para diseñar así los nuevos barrios.
Paseo marítimo
Continua nuestro agradable paseo con las vistas del Mediterráneo, los pequeños miradores y también el Jardin des Poètes con plantas exóticas. Desde aquí ya comenzamos a ver sobresaliendo entre las casas del casco histórico, el castillo de Grimaldi.
Murallas
Las murallas bordean a toda la población para protegerla del mar y en algunas zonas más débiles se encuentran los bastiones, desde los que se protegían los posibles ataques a la localidad.
El interior de la población también estuvo rodeado por murallas en la época medieval, de ella quedan algunos lienzos, torres y puertas. En tu paseo te podrás hacer una idea más clara de la historia defensiva de la ciudad y de la importancia que tuvo en la época.
En una torre de las murallas de la Edad Media se encuentra uno de los museos que ver en Antibes, el Museo de la Torre. Tras sus usos militares fue convertida en la vivienda de una familia de pescadores.
Actualmente recoge en su interior una rica colección de trajes, herramientas, escritos, fotografías, pinturas y cerámicas, objetos y documentos importantes de su historia y las costumbres de principios del siglo XX. Las visitas solo son con cita previa (pregunta en la oficina de turismo).
También podrás ver la Puerta del Olmo, que formaba parte de las murallas a finales de la Edad Media. Contó por aquel entonces con cuatro puertas de acceso, pero tan solo se conserva esta.
Castillo Grimaldi
El principal lugar defensivo que ver en Antibes es el Castillo Grimaldi. Sus orígenes se remontan al siglo XII, y propiedad de la familia Grimaldi desde 1385.
En 1608 el castillo es adquirido por Enrique IV para la corona francesa y a partir de entonces pasará por ser sede del gobernador, ayuntamiento, cuartel y museo de arqueología en 1924. Este último se trasladará posteriormente, como hemos visto, al bastión de San Andrés.
Romual Dor de la Souchère, en 1946, era el conservador del museo, le propone a Picasso que instale su taller en las instalaciones del castillo, ya que en el lugar donde trabajaba el pintor, se había quedado sin espacio.
Es así como Picasso traslada su taller al antiguo castillo que por esta época es ya más un palacio. Lo convierte en su lugar de trabajo y lo decora con sus obras. Entre septiembre y octubre de 1946 pintó para decorarlo veintidós paneles, 23 pinturas y 44 dibujos.
Y en 1966, el castillo Grimaldi, se convierte en Museo Picasso. En su interior podrás admirar unas 275 obras suyas y también de otros importantes artistas.
Torre Grimaldi
No se sabe con certeza la fecha exacta de la construcción de la torre Grimaldi, ubicada junto al castillo. Aunque se cree que podría datar del siglo XI.
Tiene una altura de 30 metros repartidos en cuatro plantas. Tiene base cuadrada de siete metros y medio de lado con un espesor en la base de 2 metros. Muchas de las piedras con las que se construyó pertenecen a edificios romanos de la zona, en algunas todavía se pueden ver inscripciones romanas.
Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción
Junto al castillo se encuentra la Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, principal templo que ver en Antibes.
Está construido sobre los restos de un templo romano dedicado a las diosas Diana y Minerva, y fue constantemente destruido a lo largo de los siglos. En 1991 se efectuó una renovación completa.
Rue Massena - Mercado provenzal
Recorremos ahora las estrechas calles de la población para descubrir sus más bonitos rincones. Pasadizos que llevan hacia la costa, y pintorescas callejuelas. Todas ellas tarde o temprano te llevarán a la Rue Massena.
Esta calle se construyó sobre el lugar que ocupaban las murallas a finales de la Edad Media. En su centro se encuentra el mercado, en el que se venden por las mañanas todo tipo de productos provenzales.
El Mercado provenzal de Antibes es una gran cubierta metálica y de vidrio, que se llena de puestos con productos frescos de la Provenza, un mercado de visita obligada para los amantes de la gastronomía.
Playa de la Gravette
Continuamos nuestro paseo callejeando y acercándonos de nuevo a la costa mediterránea, poco a poco llegamos a la playa de la Gravette.
Esta playa es una de las mejores para el baño por su forma cerrada, por lo que está siempre muy concurrida. En verano está vigilada y cuenta con duchas. Además, las vistas hacia la población desde la playa de la Gravette, no pueden ser más bonitas.
Port Vauban
Y tras la playa se encuentra el puerto Vauban, el mayor puerto deportivo de Europa en términos de tonelaje, que cuenta con 1500 amarres, de los cuales 18 son para super yates.
Es un paraíso para ver yates de todas las formas y tamaños, desde elegantes barcos de carreras hasta enormes super yates. Merece la pena pasear por allí y “fisgar” un poco.
También podrás disfrutar del paseo marítimo y de las impresionantes vistas al Mediterráneo y a las colinas que lo rodean.
Fort Carré
Aunque nosotros no tuvimos tiempo de incluirlo entre las cosas que ver en Antibes, al otro lado del puerto se encuentra el Fort Carré (Fuerte Cuadrado).
Si quieres profundizar en la historia de la ciudad, merece la pena que visites esta fortaleza construida en el siglo XVI, jugando un papel importante en la defensa de la ciudad.
Esta construcción tiene forma de estrella y entre sus recios muros podrás ver una capilla, y dependencias como el cuartel o la sala de pólvora. Además, desde allí, podrá disfrutar de unas vistas panorámicas de Antibes.
Bastión Saint Jaume y le Nomade
En uno de los brazos de protección del puerto deportivo, se encuentra uno de los lugares más icónicos que ver en Antibes. Por su situación, sus vistas, su historia y su decoración vanguardista.
Hablamos del bastión Saint Jaume, otra de las fortificaciones de la antigua muralla que permanece en pie, cuya construcción se inició en 1557.
En este bastión hubo un importante astillero, y aquí se construyó el famoso Calypso del comandante Cousteau. Cesó su actividad en 1985 y tras una completa reconstrucción, acoge un maravilloso lugar de paseo.
En este rincón se encuentra la monumental escultura de El Nómade. del artista catalán Jaume Plensa. Una mágica escultura de acero inoxidable pintado de 8 metros de altura, cuya mirada imaginaria está dirigida hacia la inmensidad del Mediterráneo.
Chapelle Saint Bernardin
De vuelta al centro de la población, fuimos a ver la Chapelle Saint Bernardin, que data del siglo XVI. Está catalogada como monumento histórico desde 1989 y fue restaurada íntegramente entre 1995 y 2011.
La fachada es de estilo neogótico coronada por torretas con la figura de Lucifer sobre la puerta, representado como un terrible dragón alado que se retuerce al pie de la cruz, abatido por santos y ángeles protectores.
El luminoso interior te sorprenderá, su techo es de color azul ultramar estrellado y está decorada con frescos del siglo XVI, y bellos cuadros que seguro que captan tu atención.
Calles y rincones del centro
Volvemos al casco histórico y recorremos ahora sus plazas y sus calles peatonales donde podrás hacer compras. Verás pintorescas tiendas de artesanía, joyas, cerámica, chocolate, productos provenzales... seguro que encontrarás algo interesante.
También podrás disfrutar del ambiente de sus animadas plazas, que a esta hora de la tarde se comienzan a llenar.
Cap d'Antibes
Puedes completar el viaje a Antibes visitando en el otro extremo de la localidad el Cap d'Antibes. Una península con bellas playas rodeadas de abundante vegetación, en la que se construyeron algunas de las villas y hoteles más lujosos de toda la región.
Un lugar perfecto para pasar un día de sol en la Riviera Francesa, donde disfrutar de los senderos naturales con espléndidas vistas del mar.
Vídeo de Antibes
Y ahora ya sabes todo lo que ver en Antibes, o al menos lo más interesante. Una bellísima de la Costa Azul de Francia, con un montón de lugares históricos para recorrer. Y por supuesto con playas perfectas para disfrutar del buen tiempo y de las tan merecidas vacaciones.
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