Hoy vamos a hablarte del Camino de Santiago francés, uno de los itinerarios con los que cuenta el peregrino para llegar a Santiago de Compostela. Es de todos ellos, el más reconocido internacionalmente y además el que cuenta con una tradición histórica bien documentada.
Te hablaremos de sus orígenes, de los motivos para realizarlo, desde donde comienza, los mejores puntos de partida… Y también muchos datos interesantes, así que, si estás pensando en hacerlo, continúa leyendo que te lo contamos todo.
Un repaso muy rápido a su historia
El Camino de Santiago nace en el siglo IX con el descubrimiento de los restos del Apóstol Santiago el Mayor, en el lugar donde hoy se encuentra la ciudad de Santiago de Compostela. Fue el comienzo de la peregrinación jacobea, y se convirtió en un símbolo de convivencia entre personas de diferentes culturas y del desarrollo del cristianismo.
El Camino de Santiago francés es el que cuenta con mayor tradición histórica, fue descrito por Aymeric Picaud en el año 1135 en el Libro V del Codex Calixtinus. Esta es una auténtica guía medieval en la que se habla detalladamente de los recorridos desde Francia, los santuarios de la ruta, la comida, las fuentes… todo explicado con claridad para hacerlo más fácil.
A partir de la publicación de este “best seller medieval”, el Camino Francés y las peregrinaciones alcanzan un enorme apogeo que atrae a multitud de peregrinos.
Aunque el mayor auge se produce a partir de 1993, como elemento turístico, cuando se declara Primer Itinerario Europeo de Interés Cultural por el Consejo de Europa y de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Otros Caminos de Santiago
Además del Camino de Santiago francés, el peregrino tiene el Camino del Norte, el Camino Primitivo, la Vía de la plata o Camino mozárabe, el Camino Inglés y el Portugués.
A todas estas rutas hay que unirle multitud de variantes y ramales que se unen a ellas por otros lugares, y todas con el mismo objetivo, venerar al Apóstol.
¿Por qué la gente hace el Camino de Santiago?
El motivo de este largo camino a Santiago era puramente religioso, los peregrinos hacían este “viaje espiritual” para honrar al apóstol al llegar hasta su tumba en la Catedral de Compostela.
Actualmente a los motivos religiosos hay que añadirles los motivos emocionales y espirituales, las promesas, los agradecimientos, retos personales o peticiones de salud.
Y a ello hay que unirle el descubrimiento de paisajes asombrosos, caminos a veces desiertos y otras veces entre frondosos bosques junto a ríos que acompañan al caminante.
Y por supuesto pueblos y ciudades increíbles, importantísimas edificaciones iglesias románicas, monasterios, castillos templarios... todo ello forma parte del grandioso patrimonio histórico y cultural de la ruta jacobea.
La Compostela
La Compostela es el documento que certifica que los peregrinos que llegan a la tumba del Apóstol en las muchas rutas a pie, en bicicleta o a caballo, han completado los últimos 100 kilómetros si van a pie, o los últimos 200 en bicicleta.
Para que puedas acreditarla necesitas el Documento del Peregrino o credencial, que identifica al que lo lleva y permite su estancia en albergues de peregrinos y que se va sellando en lugares oficiales.
Inicio del Camino de Santiago francés
El inicio del Camino de Santiago Francés se encuentra en la localidad francesa de San Juan de Pie de Puerto, aunque muchos peregrinos prefieren comenzar desde Roncesvalles, para evitar la alta dificultad de la ruta entre los Pirineos que separa Francia con España.
La ruta completa es de más de 700 kilómetros, y cada vez hay más peregrinos la deciden hacer a pie o en bicicleta, incluso a caballo. La ruta se divide en etapas para poder disfrutar del patrimonio y la cultura local, y tiene una duración media de un mes.
Otros inicios de la Ruta del Camino de Santiago francés
Probablemente no tengas tanto tiempo y te apetezca experimentar por ti mismo la sensación de camino y la convivencia. La más corta se hace desde Sarria, ya que cumple los más de 100 km necesarios para la Compostela. Este camino se puede hacer en 5 días, y también es perfecto para iniciarse.
Pero todo depende de las ganas, la compañía, el tiempo y tu resistencia por supuesto. Puedes iniciarla desde Pamplona, Burgos, León, Ponferrada… Existen tantos inicios como peregrinos, tú decides.
Las enormes dificultades por las que los peregrinos pasaban nada tienen que ver con las de ahora y los peregrinos encuentran muchas comodidades y facilidades a su alcance, todo tipo de hoteles, hostales, pensiones y albergues y lugares para comer para todos los precios.
¿Has hecho alguna vez la Ruta del Camino Francés? Cuéntanos que parte hiciste o si la has hecho entera, nos encantará leerte.
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