Hoy nos vamos de Senda Costera por Asturias, es una sencilla ruta
senderista que une dos bonitas playas,
la de La Griega y la de La Isla. Además de ver los bonitos parajes
costeros a los que nos tiene acostumbrados Asturias, en los que el mar se
funde con la montaña, veremos huellas de dinosaurios e incluso una
trinchera de la guerra civil española. ¿Te vienes? Es apta para todos los
públicos, además si el tiempo acompaña te puedes pegar un buen
chapuzón.
Senda Playa la Griega - Playa la Isla
Recorrido: Playa de la Griega – La Isla – Playa dela Griega.
Ruta lineal: unos 13 kilómetros ida y vuelta
Dificultad: baja
Ruta lineal: unos 13 kilómetros ida y vuelta
Dificultad: baja
Mapa
Comenzamos la ruta en la playa de la Griega (Colunga, Asturias), allí hay mucho aparcamiento a ambos lados
del río Libardón que desemboca en la playa. Hay zona gratis y zona de
pago, así todo te recomiendo madrugar porque en temporada alta puede
ser algo difícil tanto en una como en la otra.
Playa de la Griega
La Playa de La Griega es un arenal de arena dorada en el que desemboca el río Libardón. Tiene un camping a unos 200 metros por lo que está muy
frecuentada. Forma parte del Paisaje Protegido de la Sierra del Sueve.
Comenzamos la Senda
La senda empieza en el lado oriental de la playa, hay carteles
indicativos, no tiene pérdida. Comenzamos a caminar ascendiendo poco a
poco y adentrándonos en un frondoso bosque se eucaliptos para
llegar, unos 500 metros después, a uno de los puntos clave de la
ruta.
Huellas de dinosaurios
Una indicación marca a un lado a Güerres y La Isla, y al otro a las icnitas.
Aunque nuestro camino es La Isla, nos desviamos unos minutos a ver las
huellas. Unas escaleras de madera nos conducen a un pequeño mirador
justo encima del yacimiento, desde allí las puedes observar y también
puedes bajar a verlas de cerca y pisar donde ellos pisaron.
Este yacimiento pertenece a la Formación Tereñes, y aquí se
pueden ver
las huellas de dinosaurio saurópodo más grandes del mundo, miden 1.30
metros de diámetro.
Hay un bloque formado por diferentes estratos, en el superior es en el
que mejor se ven, ya que la erosión del mar no le ha afectado tanto. Hay muchas huellas, algunas se diferencian mejor que otras, y todas se
produjeron en el momento en el que los animales extrusionaron el barro con su pisada y posteriormente se fosilizó.
Retrocedemos al cruce que habíamos visto y continuamos nuestro paseo
por el bosque de eucaliptos, sus raíces nos sirven a veces de escaleras
naturales y encontramos subidas bastante acentuadas, aunque si estás acostumbrado no pasa nada, si no, paras unos minutos y solucionado.
Te encontrarás más adelante un par de miradores en los que
contemplar el espectáculo que nos ofrece el mar Cantábrico. El
pueblecito que se ve al fondo a la izquierda es
Lastres, una de las localidades más bonitas de Asturias.
Las arboledas pasan a ser senderos junto al mar,
praderías y algunas plantaciones protegidas por alambradas. Ojo
que algunas están electrificadas para que los rebaños no se salgan de su
terreno y se caigan por los acantilados.
El camino de bifurca y a la derecha al fondo se encuentra el pueblecito de Güerres, si te apetece cambiar, a la vuelta puedes ir por él y aparecer aquí.
Seguimos bordeando la costa y disfrutando de las maravillosas vistas
del mar y la Sierra de Sueve como telón de fondo. Si te gusta el
senderismo de montaña, hay una
preciosa ruta para subir al Pico Pienzo que te describo en este post.
Pasaremos por la playa de la Huelga, un pedrero frecuentado por
pescadores, y más adelante pequeñas calas de piedra.
Poco a poco comenzamos a ver algunas de
las casas del pueblo de La Isla. En la de la siguiente foto no
nos importaría nada vivir una temporada.
Tenemos que pasar por encima de un pequeño muro, pero tranquilo, es
bajo y tiene escalones para facilitar el paso. Salimos unos metros a la
carretera y llegamos a la pequeña localidad.
A la izquierda tienes el desvío que te lleva a las barricadas de la
guerra civil, y de frente el pueblo de la Isla. Puedes escoger
cualquiera de los dos caminos y volver por el otro. Nosotros atravesamos La Isla y contemplamos sus ordenadas
construcciones, y llegamos a la playa.
Playa de la Isla
La Isla es esta bonita y frecuentada playa asturiana toma su
nombre de un islote al que se accede a pie en bajamar. Mide unos 800
metros y es de arena dorada y se une en marea baja con otra playa
llamada El Barrigón.
Si el día está bueno, puedes aprovechar para darte un buen chapuzón en
sus aguas y emprender el camino de vuelta más fresquito.
Emprendemos el camino de vuelta, pero en vez de volver por el pueblo, bordeamos la playa y llegamos a un bonito paseo. Primero hay unas mesas de pic-nic, y más adelante las trincheras de la guerra civil de las que te hablé.
En julio de 1936, el concejo de Colunga era del bando republicano. La
guerra terrestre no llegaría al concejo hasta octubre de 1937. Un
aeródromo de la Aviación republicana cercano y la posible amenaza de los
buques de la Marina nacional, que patrullaban el Cantábrico, hizo que
las autoridades militares asturianas elaborasen un plan de defensa de
costas y estas trincheras formaron parte de ese plan.
Se encuentran
excavadas en un promontorio en el extremo norte de la playa de La Isla, para contrarrestar cualquier posible ataque. Esta trinchera tiene una
diferencia con la mayoría de la demás que se excavaron en Asturias, ya
que tiene disposición radial, siendo lineal la forma más habitual
en la región.
Tras contemplar las trincheras emprendemos el camino de vuelta y
contemplamos las vistas en el otro sentido, que siempre parecen un
paisaje diferente.
¿Te ha gustado? ¿La has hecho algina vez? Cuéntanos tu experiencia,
estaremos encantados de leerte. Y si te ha gustado este post, compártelo
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