Hoy queremos descubrirte los 20 imprescindibles que ver en Malinas, una preciosa ciudad belga, ubicada estratégicamente entre Bruselas y Amberes.

Malinas, Mechelen en flamenco, tiene una dilatada historia, ya que fue la capital de los Países Bajos Borgoñones. Por ello cuenta un interesante patrimonio en el que destaca la Catedral de San Rumoldo, su pintoresca Grote Markt, o los bellos y tranquilos paseos que puedes dar en las aguas del río Dyle o por sus orillas.

Es un destino con mucho ambiente, ideal para una escapada, en el que te sorprenderán también sus museos o sus cervecerías tradicionales. Y si te coincide, como a nosotros, con las celebración de algún festival de música, estás de suerte. ¡Acompáñanos a descubrirla, porque te va a sorprender!

Qué ver en Malinas en 20 lugares imprescindibles

Índice del artículo
  1. Dónde está Malinas
  2. Dónde alojarse
  3. Qué ver en Malinas
    1. Catedral de San Rumoldo
    2. Grote Markt
    3. Schepenhuis
    4. IJzerenleen
    5. Haverwerf
    6. Iglesia de San Pedro y San Pablo
    7. Iglesia de San Juan
    8. Iglesia de Nuestra Señora sobre el Dyle
    9. Iglesia de Santa Catalina
    10. Basílica de Nuestra Señora de Hanswijk
    11. Iglesia del Beaterio
    12. Beaterio
    13. Palacio de Margarita de Austria
    14. Palacio de Margarita de York
    15. Museo Hof van Busleyden
    16. Museo Het Kunstuur
    17. Fábrica de Cerveza Het Anker
    18. Refugio Abadia de Sint Truiden
    19. Puerta de Bruselas
    20. Bonus: Paseo en barco por el Dyle - Bootjes In Mechelen
  4. Qué ver cerca de Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Dónde está Malinas

Malinas, es una ciudad de la provincia de Amberes, ubicada en la región de Flandes, de Bélgica.


Dónde alojarse

Nos alojamos en el Holiday Inn Express Mechelen City Centre, más céntrico imposible y una relación calidad-precio perfecta.

Tiene habitaciones muy cómodas y limpias, recepción 24h y aparcamiento subterráneo por un suplemento, es un hotel muy recomendable. El desayuno es muy variado y completo.

Y un sistema de recompensas que nos hizo mucha gracia. Como estuvimos dos días y no quisimos que nos hiciesen la habitación, nos invitaron a dos consumiciones en la cafetería.


Qué ver en Malinas

Es muy sencillo recorrer todos los lugares emblemáticos que ver en Malinas, y para hacerlo no necesitas transporte, puedes ir caminando a todas partes sin problema. ¡Comenzamos!

Malinas

1- Catedral de San Rumoldo

Sin duda, el monumento más emblemático que ver en Malinas, es la Catedral de San Rumoldo con su imponente torre, un edificio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La catedral fue construida en honor de San Rumoldo, un misionero irlandés del siglo VII martirizado en los alrededores de Malinas. Se comenzó en el año 1200, y se prolongó hasta comienzos del siglo XVIculminando la obra con la gran torre que fue realizada entre 1452 y 1520.

Varias fueron las adversidades a las que se tuvo que enfrentar la catedral durante su historia. Durante las guerras religiosas del siglo XVI, la iglesia sufrió grandes destrozos perdiéndose mucho en su interior. En la Segunda Guerra Mundial, Malinas fue bombardeada, y en 1972 se incendió, pero pudo con todas ellas.

Muchas son las obras de arte que puedes contemplar en su interior, joyas como el altar Mayor de Lucas Faydherbe, de 1665. Y una rica colección de obras de arte de la pintura flamenca, barroca y neoclásica. Y una de las cosas que más nos llamó la atención fue el púlpito de madera de roble que data del año 1723, y que representa, la caída del hombre y su salvación.

Catedral de San Rumoldo

Catedral de San Rumoldo

Catedral de San Rumoldo

Torre de la catedral

Y, además, merece la pena que subas a lo alto de la torre de San Rumoldo, un imprescindible que ver en Malinas por muchas cosas que te vamos a contar.

Subir te costará un pequeñísimo esfuerzo, “tan solo” son 538 escalones. Pero vale la pena, tanto el trayecto, en el que podrás disfrutar de sus campanas, una bodega y de los engranajes en movimiento de sus dos carillones. Malinas alberga la Real Escuela de Carillón, la más antigua del mundo.

Una vez arriba, la vista de la ciudad a 97 metros de altura es única y te proporcionan una experiencia única. Imágínate cómo hubiera sido si la hubiesen acabado como estaba diseñada con 167 metros.

Torre de la Catedral de San Rumoldo

Catedral de San Rumoldo

2- Grote Markt

La Grote Markt es la principal plaza que ver en Malinas y es el centro del casco histórico. En el momento de nuestra visita, la plaza estaba ocupada por el escenario y los chiringuitos del Maanrock, y no pudimos ver bien algunos de los edificios como el ayuntamiento, pero, por otro lado, pudimos disfrutar de un fantástico festival.

La parte derecha del ayuntamiento era una lonja de paños de principios del siglo XIV y se quiso construir junto a ella, una torre de campanario como símbolo del poder de la ciudad. Pero nunca pudo terminarse ya que en el siglo XIV el comercio textil cayó y se acabó con la caída el dinero.

Ahora puedes ver a la izquierda del campanario el llamado Palacio del Gran Consejo de principios del siglo XX, siguiendo los planos originales del siglo XVI. Por la calle Befferstraat podrás ver 36 medallones con imágenes de mandatarios: desde Pepijn van Landen (622-639) hasta el duque de Borgoña, Felipe el hermoso (1478-1506).

Grote Markt de Malinas

Ayuntamiento de Malinas

Ayuntamiento de Malinas

La rodean bellísimos edificios históricos de épocas y estilos diferentes que van desde el estilo renacentista del siglo XVI al rococó del siglo XVIII. Entre ellos que destaca la Casa Keulen en el número 26, de uno de los arquitectos de gótico brabantino más importantes de la época.

Grote Mark de Malinas

Grote Mark de Malinas

Grote Mark de Malinas

3- Schepenhuis

Entre la Grote Markt y la catedral se encuentra el edificio histórico Schepenhuis, que fue el primer ayuntamiento de piedra de Flandes. En él se hacían las reuniones del tribunal municipal en el siglo XIII, y fue sede del Gran Consejo y del Parlamento de Malinas en el siglo XV. Eso se debió a la que ciudad se transformó en el centro legal de los Países Bajos de Borgoña bajo el gobierno de Carlos el Temerario.

Desde el 2018 la Oficina de Turismo Visit Mechelen, se encuentra alojada en su interior, por lo que es el lugar ideal para comenzar tu visita a Malinas.

Schepenhuis de Mailinas

Frente a este bonito edificio hay una estatua en honor a Margarita de Austria, hermana pequeña de Felipe el hermoso.

Recibe el apodo de "Nuestra Margarita" esta mujer de carácter y gobernadora de los Países Bajos (1506-1530) cuya influencia en la ciudad fue enorme.

Margarita de austria, Malinas

4- IJzerenleen

La IJzerenleen es la amplia avenida que está detrás de la oficina de turismo. una zona realmente bonita que ver en Malinas, por la que discurría un arroyo del que todavía se pueden ver sus barandillas de protección.

En ella encontrarás preciosos edificios, que a pesar de que fueron destruidas en la Primera Guerra Mundial, fueron reconstruidas tras un concurso de arquitectura, dándole el mismo aspecto que las fachadas que aquí existían de entre los siglos XV al XVII. Aquí había instalado otro de los escenarios del Maanrock.

IJzerenleen, Malinas

5- Haverwerf

En el Haverwerf se descargaba y se comerciaba con la avena, ya que Malinas tenía la exclusividad de derechos de depósito. Los barcos tenían que parar aquí durante tres días y si les sobraba mercancía, después podían venderla en otros pueblos.

Junto al puente destacan tres casas que datan de los siglos XVI y XVII. La que hace esquina se Het Paradijske (el pequeño paraíso). En el centro la casa De Duiveltjes (los diablillos), con una maravillosa fachada de madera. Y la de la izquierda se encuentra la casa de San José.

Tres casas de Haverwerf, Mailnas

Torres en el Dyle

El patrimonio religioso de Mechelen se encuentra agrupado en el denominado Torens aan de Dijle, es decir Torres en el Dyle. Un grupo de encantadores voluntarios se encargan de dar a conocer el patrimonio de sus 8 templos principales.

En ellas se realizan diferentes exposiciones y actos públicos para animar a la población y a los turistas a conocerlas. Uno de estos ocho templos es la catedral. Te hablamos a continuación de los otros siete.


6- Iglesia de San Pedro y San Pablo

Sint-Pieter-en-Paulkerk. La Iglesia de San Pedro y San Pablo fue un templo jesuita dedicada a San Ignacio y San Francisco Javier. Tras la disolución de la orden se transformó en iglesia parroquial de San Pedro y San Pablo, porque la iglesia que estaba dedicada a ellos estaba en ruinas.

El interior está bellamente decorado, y una de las piezas que más nos llamó la atención fue sin duda el púlpito, que simboliza a san Francisco Javier en las misiones y los “cuatro” continentes. En el siglo XVI, Oceanía todavía no había sido declarado el quinto continente.

También los catorce confesionarios empotrados son un ejemplo extraordinario del tallado malinense. Esta gran cantidad de confesionarios se debe a que era una iglesia de peregrinaje, y albergaba muchas reliquias. Para poder tocarlas, había que confesarse para estar libre de pecado.

Iglesia de San Pedro y San Pablo de Malinas

Iglesia de San Pedro y San Pablo de Malinas

7- Iglesia de San Juan

Sint-Janskerk. La iglesia parroquial de San Juan era una de las más ricas de Malinas, eso se debía a que los miembros del Consejo Mayor vivían alrededor de ella e incluso la utilizaban como “Parlamento de Malinas”. Este se convertiría en el siglo XV en el Consejo Mayor, tribunal supremo de los Países Bajos, que duraría hasta la Revolución Francesa.

Entre todas las maravillas que puedes ver en la Iglesia de San Juan, se encuentra el tríptico barroco de Pedro Pablo Rubens, ubicado en el altar mayor. En el centro está representada la “Adoración de los Reyes Magos, y detrás de los paneles laterales hay un mecanismo que gira las pinturas, para que se puedan ver.

También llaman la atención las bancas de los administradores, la Capilla de los Sacramentos o los grandes murales del siglo XIV encontrados detrás de la caja de órgano. Esta fue la única que no pudimos ver su interior.

Iglesia de San Juan de Malinas

8- Iglesia de Nuestra Señora sobre el Dyle

Dijlekerk. Otra de las joyas que ver en Malinas es la Iglesia de Nuestra Señora de Over-de-Dijle, construida entre los siglos XIV y XV, sobre el primer templo construido en Malinas.

Cuenta con una interesantísima colección de obras de arte, entre ellos es una obra de Rubens, en la que se ve una encomienda de los vendedores de pescado, el gran tríptico “La pesca milagrosa”, que representa la historia bíblica y la riqueza de su oficio.

También llama la atención la estatua de Nuestra Señora de la Pierna Torcida (Onze-Lieve-Vrouwe-met-de-scheve-lee), del siglo XIV. Y en la torre también hay un completo carrillón con 49 campanas.

Iglesia de Nuestra Señora sobre el Dyle, Malinas

Iglesia de Nuestra Señora sobre el Dyle

9- Iglesia de Saint Catalina

Sint-Katelijnekerk. La iglesia gótica de Santa Catalina es del siglo XIV en un barrio que en aquella época era muy pobre. Esto se nota en su pequeño tamaño, y en sus bóvedas de madera, más barata que las de piedra.

Está dedicada a Catalina, una figura muy venerada en la época romana y la iglesia hace muchas referencias a ella, como por ejemplo los doce rosetones en la nave, en referencia al instrumento de tortura.

Iglesia de Saint Catalina

Iglesia de Saint Catalina

10- Basílica de Nuestra Señora de Hanswijk

La Basílica de Nuestra Señora de Hanswijk era un templo de peregrinaje, su diseño es de Lucas Faydherbe y fue una de las primeras iglesias con cúpula en los Países Bajos.

Delante en la iglesia se encuentra la estatua milagrosa de María, que es llevada todos los años en la procesión de Hanswijk, el último domingo antes de la Asunción del Señor.

Basílica de Nuestra Señora de Hanswijk

11- Iglesia del Beaterio

La última de las iglesias de las que te vamos a hablar es la iglesia del Beaterio, ya que en Malinas hubo un importante beaterio en la ciudad.

A finales del siglo XVI hicieron construir la iglesia y en 1629 se colocó la primera piedra de este bello templo barroco con influencia italiana. Las beguinas contrataron a prestigiosos arquitectos y artistas, porque manejaban un gran capital en la época, y además se calcula que había cerca de unas mil, y la mayoría donaban sus dotes.

Tiene una fachada barroca espectacular, inspirada en el modelo italiano y está decorada con mujeres santas, a las que las beguinas profesaban su devoción.

Iglesia del beaterio de Malinas

Iglesia del Beaterio de Malinas

12- Beaterio

Antes de continuar, te explicaremos lo que es un beaterio, por si no lo sabes. Eran unas estructuras en las que se asociaban mujeres cristianas (beatas) que vivían en sus propias casas o en común en los beaterios. No tenían votos, aunque sí había una norma general: austeridad y castidad, pero no son religiosas y podían abandonarlo en cualquier momento. Solían realizar trabajos para obtener sustento y poder ayudar así a pobres y desamparados.

En 1587 a las afueras de la ciudad hubo un beaterio que fue demolido y las beguinas se trasladaron al centro de la ciudad en lo que ahora se llama el Gran Beaterio y también existe el Pequeño Beaterio.

Para ello compraron algunos inmuebles en los que construyeron nuevas viviendas e hicieron jardines cerrándolos con puertas. Es un lugar muy bonito y tranquilo, donde se respira paz y tranquilidad. Ten en cuenta que allí ahora vive gente, por lo que te recomendamos que respetes su privacidad.

Gran beaterio de Malinas

Uno de los edificios que ocuparon las beguinas fue por ejemplo el Monasterio de los Celitas, fundado por esta congregación de religiosos hospitalarios, que se ocupa de cuidar a enfermos mentales y con enfermedades infecciosas en 1448.

Monasterio de los Celitas, Malinas


13- Palacio de Margarita de Austria

Entre los lugares que ver en Malinas, se encuentra el Palacio de Margarita de Austria, que se instaló en la ciudad en 1507 como gobernadora, convirtiéndose en capital de los Países Bajos.

El palacio de Saboya fue uno de los primeros edificios de los Países Bajos con elementos renacentistas. Era un lugar de encuentro de artistas, humanistas y científicos y artistas. En 1616 se mudó allí el Gran Consejo, que hasta ese momento había estado en el edificio del Schepenhuis.

En la fachada figura el escudo de armas de Margarita junto al de su sobrino, el emperador Carlos V, y una imagen de la Dama Justicia.

Palacio de Margarita de Austria, Malinas

14- Palacio de Margarita de York

Frente a esta palacio se encuentra el Palacio de Margarita de York en la fachada puedes ver su escudo y el de su esposo el duque de Borgoña Carlos el Temerario.

Al quedar viuda en 1480 convirtió el edificio en un palacio y a él acudía gente muy influyente de la sociedad de Malinas. A partir del siglo XVII se utilizó como monasterio jesuita y en el siglo XIX, se convirtió en teatro.

Palacio de Margarita de York, Malinas

15- Museo Hof van Busleyden

Hay varios museos interesantes que ver en Malinas, uno de ellos es el Hof van Busleyden, un bello edificio del siglo XVI, hogar de Hiëronymus van Busleyden, humanista y un buen amigo de Erasmo de Rotterdam.

Durante la visita descubrirás las obras de arte más destacadas del Renacimiento nórdico, descubrirás capítulos muy interesantes de la historia durante el periodo borgoñón y de algunos de sus habitantes, y podrás ver también interesantes exposiciones temporales.

Tras la visita, podrás disfrutas en los jardines del museo, la artista contemporánea Berlinde De Bruyckere ha sido la encargada de su de la interpretación artística. Tiene tres jardines, dos de ellos son de acceso gratuito durante todo el año, mientras el museo está abierto y al tercero solo se accede durante la visita al museo.

Museo Hof van Busleyden

16- Museo Het Kunstuur

Otro de los museos que puedes ver en Malinas es el Het Kunstuur, es decir, la hora del arte. Se ubica en la capilla del Espíritu Santo, que data de finales del siglo XIII y se encuentra frente a la torre de San Rumoldo.

En el museo se exponen 32 obras maestras de entre 1887 y 1938 de coleccionistas privados. Es un museo diferente ya que la visita dura exactamente una hora, cada 20 minutos y con un máximo de 8 visitantes, podrás disfrutar una vivencia intimista de las obras con iluminación individual y con auriculares oirás música y relatos sobre la obra.

Museo Het Kunstuur

17- Fábrica de Cerveza Het Anker

Te guste la cerveza o no, no puedes dejar de visitar la cervecería Het Anker, con fama mundial. Fue fundada en 1471, por lo que es una de las cervecerías más antiguas de Bélgica.

Puedes realizar una visita guiada por sus instalaciones, aprender sobre el proceso de elaboración de la cerveza, ver los antiguos edificios, y también las modernas instalaciones de enfriamiento, fermentación y lagering (maduración). Y también degustar varias de sus creaciones.

En el recorrido podrás ver las tres cubas de cobre de la sala de elaboración, que datan del fin de la Segunda Guerra Mundial. En ellas se sigue elaborando cervezas ganadoras de varios premios, como la Gouden Carolus Classic y Gouden Carolus Tripel.

La más famosa es la Gouden Carolus Classic y ha sido ganadora de la medalla de oro en los World Beer Awards, e incluso fue elegida una de las siete mejores cervezas del mundo. Por supuesto puedes degustarlas en todos los bares de Malinas.

Fábrica de Cerveza Het Anker

Maneblussers

“¡Fuego, fuego, la torre está en llamas!”, gritaba un hombre borracho. La noche del 27 de enero de 1687, la luna proyectaba su resplandor rojizo sobre la torre de San Rumoldo.

Se dio la alarma y la gente fue corriendo a ayudar a apagar el supuesto incendio. Antes de llegar a la torre, la luna se desplazó lentamente a través de la niebla. A partir de ese momento, los malinenses recibieron el nombre de Maneblussers o “apagadores de luna”. Y la fábrica de cerveza Het Anker tiene una cerveza inspirada en este momento.


18- Refugio Abadia de Sint Truiden

Los abades de las abadías y los monasterios contaban con refugios en las ciudades amuralladas. En ellos se hospedaban cuando se encontraban de paso, y durante las guerras les protegían.

El refugio de la abadía de Sint-Truiden es del siglo XVI y actualmente forma parte del palacio arzobispal.

Puedes verlo desde el puente sobre el Groen Waterke, uno de los muchos bellos rincones que ver en Malinas. Este riachuelo debe su nombre a la superficie del agua, cubierta por una planta acuática.

Refugio Abadia de Sint Truiden

19- Puerta de Bruselas

El Portal de Bruselas recibió su nombre con motivo de la construcción de una vía a Bruselas en en 1698. Con el paso de los años se emplearía como telégrafos, refugio durante la Segunda Guerra Mundial o taller de arte entre otros usos más. Hoy día en su interior se guardan los muñecos del teatro de títeres DE MAAN.

Puerta de Bruselas, Malinas

20 Bonus: Paseo en barco por el Dyle - Bootjes In Mechelen

Merece la pena que incluyas entre las cosas que ver en Malinas, un paseo en barco por el Dyle. Parten del centro histórico de la ciudad, en el puente peatonal entre Vismarkt y Haverwerf y te llevarán recorriendo los canales en un agradable paseo con explicaciones también en español en el que además podrás tomarte un refresco, una cerveza o incluso un cava.

Podrás ver preciosos rincones como el Puente Crane, el puerto deportivo, las antiguas murallas de la ciudad en Winketpoort. La piscina de Keerdok, en el interior del río, de 1915 y la esclusa que da acceso a la conexión directa con el Mar del Norte a través del Escalda.

También podrás ver el contraste con la zona más nueva y exclusiva, los restos de la antigua cervecería Lamot, verás el Hoogbrug, que es el puente de piedra más antiguo de Flandes ya que data de1230 y muchísimo más.

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Paseo en barco por el Dyle - Malinas

Durante prácticamente por todo el largo recorrido que harás en el barco, hay pasarelas de madera para poder hacer este mismo recorrido caminando o en bicicleta, una idea fantástica.


Qué ver cerca

Malinas se encuentra a 31 kilómetros de Bruselas, a 32 de Amberes, a 25 de Lovaina y a 80 kilómetros de Gante. Y la verdad es que merece la pena hacer una ruta y recorrerlas todas ellas.

Y ahora ya sabes que ver en Malinas, una joya belga que puede que se te haya pasado desapercibida pero que merece la pena, y mucho, que conocer. Te sorprenderá su encanto histórico y artístico y su ambiente. Un destino perfecto para los amantes de la cultura, la historia (y la cerveza).