Rávena es una ciudad a la que acuden a diario miles de visitantes amantes del arte, atraídos por sus magníficos mosaicos y por los ocho monumentos que forman parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Teníamos las expectativas muy altas antes de conocerla, y lejos de decepcionarnos las superó con creces, convirtiéndose en una de nuestras ciudades favoritas de Italia.

A continuación, te vamos a contar los lugares imprescindibles que ver en Rávena, en un itinerario con mapa para que no te pierdas nada en la ciudad con los mosaicos más bellos del mundo.

Qué ver en Rávena en un día: itinerario con mapa

Índice del artículo

Dónde está Rávenna

Rávena, es una ciudad de región de Emilia-Romaña, capital de la provincia del mismo nombre de Italia.


Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO

Ravena tiene una gran cantidad de monumentos religiosos paleocristianos y bizantinos por lo que fue declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 1996. Son ocho los monumentos que han sido señalados:

Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, Baptisterio Neoniano, Museo Arzobispal - Capilla de Sant'Andrea, Basílica de San Vitale, Mausoleo de Galla Placidia, Baptisterio Arriano, Mausoleo de Teodorico y Basílica de Sant'Apollinare en Classe.



Qué ver en Rávenna

Además de estos maravillosos monumentos, hay muchísimo que ver en Rávena, y si eres amante del arte, necesitarás más de un día para verlo todo con calma.

Es cierto que a veces esto no es posible y hay que ajustar el tiempo en nuestras vacaciones. Si solo dispones de un día no te preocupes, si te organizas bien, visitar Rávena en un día es posible.

Algunos de los monumentos más interesantes que ver en Rávena se encuentran agrupados en un billete conjunto que al final del post te explico. Te los hemos marcado con otro color en el mapa y además, veras un símbolo como este 🎫 para que los identifiques.

Esto es todo lo que ver en Rávena siguiendo un itinerario que hemos preparado para que no camines de más.


Piazza San Francesco

Nos dirigimos al centro para disfrutar de los maravillosos lugares que ver en Rávena, y el primer lugar que visitamos es la Piazza San Francesco.

Esta animadísima plaza, está rodeada de hermosos palacios con soportales (un buen sitio para picar algo o tomar una cervecita) y algunos de los edificios más emblemáticos que ver en Rávena, como la Cripta Rapsoni o la Iglesia de San Francisco.

Piazza San Francesco de Rávena

Cripta Rasponi y los Jardines Colgantes

Uno de ellos es la Cripta Rasponi y los Jardines Colgantes del Palacio de la Provincia, cuyo acceso está bajo los soportales de la plaza (entre los bares).

La cripta Rasponi, consta de tres salas, una de ellas alberga un pequeño altar para funciones religiosas y en el suelo hay un mosaico con varios fragmentos provenientes de la iglesia de San Severo con diferentes animales realizados con esmaltes con gran riqueza cromática.

El jardín colgante, tiene una bonita fuente y al fondo una torre neogótica desde la que puedes ver la Piazza San Francesco con la iglesia y la "Zona del silencio".

Jardines de la Cripta Rasponi de Rávena

Basílica de San Francisco

Destaca al fondo la Basílica de San Francisco, un templo paleocristiano construido en el siglo V, aunque debido a sus reformas a lo largo de los siglos poco queda de sus orígenes.

En la última restauración, llevada en 1921, se eliminaron las estructuras barrocas que la adornaban en exceso, dejándola tal y como era el gusto franciscano. Destaca la torre campanario de base cuadrada y casi 33 metros, datada en el IX y el ábside heptagonal.

Tiene planta basilical y tres naves, separadas por 12 columnas y destaca la cabecera semicircular. Bajo el altar mayor se encuentra la cripta del siglo X, en la que se guardaban las reliquias del obispo Neone, fundador de la iglesia. Lo más curioso de ella es que su suelo está siempre sumergido en agua, incluso tiene peces, puedes ver el mosaico original que lo cubría.

En la iglesia se celebró el funeral de Dante Alighieri, y allí estuvieron sus restos hasta su traslado al pequeño templo que veremos después. Cada día suenan 13 toques de campana que recuerdan que el 13 de septiembre de 1321 murió Dante.

Cripta de la Basílica de San Francisco de Rávena

Zona del Silencio

Junto a la iglesia se encuentra la Zona del Silencio, una de las visitas más emblemáticas que ver en Ravena. Este es lugar de respeto y paz alberga el sepulcro de Dante, el Quadrarco y el Museo de Dante con los claustros franciscanos.


Tumba de Dante

Dante fue enterrado fuera del claustro de Braccioforte, pero en 1780 se le hizo un pequeño mausoleo rematado por una cúpula semiesférica, puerta de bronce e interior de mármol policromado.

En el interior, sobre la urna hay un bajorrelieve con la imagen de Dante pensativo, de Pietro Lombardo de 1483, con fondo de mármol africano y griego. También puedes ver una pequeña cruz de oro donada por el Papa Pablo VI en 1965.

Tumba de Dante de Rávena

Quadrarco di Braccioforte

Florencia solicitó en varias ocasiones los restos de Dante y en 1519 se autorizó el traslado, pero cuando abrieron el sepulcro lo encontraron vacío.

Ya en 1865 en una obra realizada en el Quadrarco di Braccioforte se encontró una caja de madera con sus restos, escondida por los monjes franciscanos para que nadie se lo llevase. (El quadrarco es un antiguo oratorio unido en la Edad Media a un pórtico de la Iglesia de San Francisco bajo el que hay dos bellos sarcófagos).

Para evitar los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, sus restos fueron escondidos bajo un montículo en el jardín adyacente. Y finalmente se trasladaron de nuevo a su mausoleo, donde se encuentran actualmente.

Túmulo de Dante de Rávena

Museo Dante

El Museo Dante se encuentra en la zona que pertenecía al convento de San Francisco. En él puedes hacer un recorrido para conocer la vida del poeta y por sus obras más importantes a través de paneles y audiovisuales. Y también allí está la Biblioteca Dante con casi 19000 obras entre incunables, códices, y obras de Dante y escritas sobre él. También puedes ver el claustro del convento.

Claustro del Museo Dante de Rávena

Catedral de la Resurrección de Cristo - Duomo

Nos dirigimos ahora a ver la Catedral de la Resurrección de Cristo cuya construcción fue por orden del obispo Urso en el año 407, junto con el baptisterio y el Palacio Arzobispal.

La catedral original sufrió importantes reformas que se sucedieron a lo largo de los siglos, como la adicción del campanario y la cripta en el siglo X, o la decoración de los mosaicos del ábside en el año 1112 por el arzobispo Geremia, cuyos restos se conservan en el Museo Arzobispal.

La transformación definitiva fue en el siglo XVIII en estilo neoclásico, manteniendo la estructura del campanario cilíndrico del siglo X y la cripta.

Tiene planta de cruz latina con tres naves y una gran cúpula en el crucero pintada al fresco por Giovanni Battista y Andrea Barbiani, con una gran linterna y ocho ventanales.

Destaca la capilla del Santísimo Sacramento, el retablo de San Cristóforo, el sarcófago de Sant'Esuperanzio...

Catedral de la Resurrección de Cristo - Duomo, Rávena

Duomo de Rávena

Duomo de Rávena

🎫 Baptisterio Neoniano o de los ortodoxos (UNESCO)

Junto a la catedral se encuentra el Baptisterio Neoniano, el más antiguo de los monumentos que ver en Ravena, mandado construir por el obispo Urso a finales del siglo IV.

El exterior muy sobrio y al verlo uno no imagina su riqueza interior. Es de ladrillo, forma octogonal y pequeños ábsides que debido al hundimiento de terreno están tres metros por debajo del nivel del suelo.

El nombre de "Neoniano" se debe al nombre del obispo Neon que reformó y decoró el interior hacia el año 458. Tiene dos órdenes de arcos superpuestos y de abajo a arriba, decoración de mármol, de estuco a la altura de las ventanas y mosaico en la cúpula.

Este mosaico tiene un medallón central con el Bautismo de Cristo en las aguas del Jordán, sobre fondo dorado. Alrededor se encuentran los Apóstoles y la banda exterior está decorada en ocho sectores arquitectónicos.

En el centro del baptisterio está la pila octogonal de pórfido y mármol griego, en el siglo XVI fue reconstruido reutilizando fragmentos del original.

Baptisterio Neoniano

Baptisterio Neoniano de Rávena

Baptisterio Neoniano

🎫 Museo Arzobispal y Capilla Sant'Andrea (UNESCO)

Y muy cerquita se encuentra el Museo Arzobispal y Capilla Sant'Andrea, otra de las visitas que no puedes dejar de incluir en las cosas que ver en Ravena.

El museo está distribuido en dos plantas con interesantísimas salas con auténticas joyas como los restos del mosaico de la Basílica Ursiana, que antes te comentamos.

Entre todas ellas su tesoro mejor guardado es la Capilla de Sant'Andrea, situada en el primer piso. Es un pequeño templo paleocristiano de carácter ortodoxo construido durante el reinado de Teodorico. Los mosaicos con la figura de Cristo, los mártires, apóstoles y evangelistas son maravillosos.

Capilla Sant'Andrea de Rávena

Capilla Sant'Andrea de Rávena

Iglesia Santa Eufemia – Domus de las alfombras de piedra

En el interior de la pequeña iglesia de Santa Eufemia, se encuentra la Domus de las alfombras de piedra (domus dei tappeti di pietra) un importante yacimiento arqueológico que tienes que ver en Ravena.

Allí podrás admirar, sobre una pasarela elevada, los esplendidos suelos con mosaicos que decoraban las 14 estancias de mármol y mosaico policromado.

Pasearás por la sala de recepción, estancias privadas de la residencia, patios, pasillos… Y podrás ver sus mosaicos, entre los que destaca el mosaico de la "Danza de los Genios de las Estaciones" o el mosaico del “Buen Pastor”.

Domus de las alfombras de piedra, Rávena

🎫 Basílica de San Vitale (UNESCO)

La Basílica de San Vitale, es una obra maestra del arte bizantino, un espectáculo para la vista. Ecclesio fue el obispo que encargó su construcción en el año 525, dedicada a San Vitale, un soldado romano mártir durante las primeras persecuciones cristianas en Rávena.

El edificio es de ladrillo visto, y tiene cuerpo octogonal, con pilastras y grandes ventanales, sobre el que se proyecta otro cuerpo también octogonal, rematado con una cúpula. En las esquinas hay contrafuertes arqueados construidos en el siglo IX, para dar firmeza al templo. También cuenta dos torres circulares que permitían el acceso a la galería destinada a las mujeres. La sur se transformó en campanario.

En el interior, los grandes ventanales se alternan con bellísimos mosaicos cubriendo las paredes, la bóveda del presbiterio y el ábsido. Mientras que la cúpula central y las capillas tienen bellos frescos barrocos del siglo XVII.

También has de fijarte en los mosaicos del suelo de la basílica y los mármoles de colores del espacio central. El colorido de la pasta de vidrio de sus teselas y sus significados no te dejarán indiferente.

El problema es que uno no sabe para donde mirar en lo que es considerado como una de las obras maestras del arte bizantino en Italia.

Basílica de San Vitale

Basílica de San Vitale de Rávena

Basílica de San Vitale, Rávena

Basílica de San Vitale, Rávena

Basílica de Santa María Maggiore

Junto a San Vitale se encuentra la Basílica de Santa María Maggiore, encargada por el obispo Ecclesius en el año 525.

Sufrió grandes reformas a lo largo de los siglos, el ábside es el original pero bastante cambiado y el campanario fue añadido entre los siglos IX y X.

Tal y como sucedió en muchas otras iglesias de Rávena, estaba decorada con mosaicos, pero al reformarse en el siglo XVII, en estilo barroco, muchos de ellos se perdieron. Por suerte en esta reforma se aprovecharon varias de sus columnas y capiteles originales.

Destaca en el interior la zona del altar mayor decorado con mármoles policromados con una bella figura de la Virgen y el niño del siglo XVII.

Hay varios enterramientos de personajes ilustres de la ciudad, como el sarcófago romano utilizado como sepulcro por la familia Rasponi, o la del arquitecto Camillo Morigia (1743-95), diseñador de la tumba de Dante.

Basílica de Santa María Maggiore de Rávena

🎫 Mausoleo de Galla Placidia (UNESCO)

Otro imprescindible que ver en Ravena es el Mausoleo de Galla Placidia, que, a pesar de la sensación de sobriedad del exterior, tiene un interior extraordinario.

Nada más entrar, podrás admirar uno de los mosaicos más maravillosos que ver en Ravena, este representa a Cristo el Buen Pastor con sus ovejas. El contraste del color del cielo azul estrellado y la cubierta de mármol amarillo lo hace especial.

En el interior hay tres tumbas, una para la persona que encargó el edificio que era la emperatriz Galla Placidia, la de su esposo y la de su hermano. A pesar de que esté la tumba de Galla, parece ser que está enterrada en Roma, donde murió.

Qué ver en Rávena: Mausoleo de Galla Placidia

Mausoleo de Galla Placidia de Rávena

Mausoleo de Galla Placidia de Rávena

Baptisterio arriano (UNESCO)

Otro de los monumentos que ver en Rávena es el Baptisterio arriano (degli Ariani). Como la mayoría de los monumentos que ver en Rávena, su suelo original queda a por debajo del actual unos 3 metros.

Fue erigido por el rey ostrogodo Teodorico el Grande a finales del siglo V, y era utilizado por los arrianos, que, junto con la ortodoxa, era una de las comunidades cristianas que coexistían entonces en Rávena. Tras la censura del culto arriano en el 565, fue convertido en un oratorio católico con el nombre de Santa María.

Tiene forma octogonal y en el interior hay una cúpula con mosaicos que representan el bautismo de Jesús por San Juan Bautista y la paloma represenando la Trinidad, un elemento no habitual en el arte arriano, ya que no era aceptada por esta doctrina. Alrededor de la escena del bautismo, se encuentran los doce apóstoles, guiados por San Pedro y San Pablo.

A pesar de que las paredes están desnudas, durante unas investigaciones arqueológicas, se descubrieron unos 170 kilos de teselas en el suelo, que probablemente las decorarían.

El baptisterio arriano se encuentra junto a la Iglesia del Espíritu Santo, catedral arriana de la que poco queda tras su reforma en 1543.

Baptisterio arriano de Rávena

Baptisterio arriano de Rávena

Basílica de San Giovanni Evangelista

La basílica de San Giovanni Evangelista fue construida a partir del año 424 por orden de Galla Placidia, como exvoto tras sobrevivir a una tormenta en el mar. Este suceso estaba representado en los mosaicos que decoraban el ábside.

El espacio está cerrado por un portal gótico del siglo XIV, tras el que hay un jardín y después se encuentra la basílica muy sencilla, con un porche de arco medieval y pilares de ladrillo. A la derecha está el campanario de base cuadrada y 42 metros de altura, construido entre los siglos IX y X y la parte más alta en el siglo XIV. Y junto al campanario el claustro construido en el siglo XVI.

El interior de la basílica es de tres naves separadas por 12 columnas de mármol a cada lado con capiteles corintios reutilizados.

El ábside no tiene sus mosaicos originales, ya que fueron destruidos por los ataques aéreos británicos que en 1944, pero es de gran interés su suelo con fragmentos de su suelo original de mosaico narrando la Cuarta Cruzada.

San Giovanni Evangelista de Rávena

🎫 Basílica de Sant'Apollinare Nuevo (UNESCO)

Nuestro siguiente imprescindible es la Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, otro de los templos de la UNESCO, que merece la pena incluir en las cosas que ver en Rávena.

Fue construida por Teodorico, a finales del siglo IV, y tuvo que convertirse al culto cristiano tras la conquista de los bizantinos.

En el sencillo exterior destaca el pórtico con columnas de mármol blanco y el campanario del siglo X con 38 metros de altura y ventanas ojivales.

El interior de la basílica te dejará boquiabierto, cuenta con tres naves separadas por columnas de mármol y capiteles corintios. Y sobre ellos unos maravillosos mosaicos con diferentes representaciones divididas en bandas, Santos Mártires, Santas Vírgenes, Santos y Profetas, y un gran ciclo monumental del Nuevo Testamento con 13 escenas a cada lado de la Pasión de Cristo, y de sus Milagros.

El ábside no es el original que estaba cubierto de mosaicos y en la actualidad está decorado con cuatro columnas de pórfido rojo, un retablo de 1732 que representa a Sant'Apollinare y diferentes pinturas de la vida del santo con marcos de estuco, incluida la cúpula.

Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, Rávena

Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, Rávena

Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, Rávena

Palazzo Teodorico

Los restos del palazzo Teodorico se encuentran junto a la basílica de Sant'Apollinare Nuovo (que hemos visto representado en su mosaico).

Se cree que fue la residencia del rey ostrogodo, aunque hay varias teorías, ya que en la zona se han encontrado en las excavaciones arqueológicas los suelos de varios edificios y mosaicos que formarían una villa, así que esto que vemos podría ser su entrada.

De estos restos hallados, la fase más antigua data de finales del siglo I. aC. Habría una gran residencia con un patio porticado rodeado de diferentes estancias. Parece ser que bajo algunos mosaicos hay otros más antiguos debido a las reformas del edificio, que permaneció activo al menos hasta el siglo VIII.

Qué ver en Rávena, Palazzo Teodorico

Piazza del Popolo

Y ya para acabar, incluimos en los lugares que ver en Rávena, su casco histórico acercándonos a una de sus plazas más emblemáticas, la Piazza del Popolo.

La Piazza del Popolo está adornada con dos columnas, una con la estatua de San Vitale y la otra con el patrón de Rávena Sant'Apollinare.

A un lado hay un edificio con un pórtico y almenas que actualmente acoge la sede de la administración municipal, también destacan en la plaza el Palazzo dei Raponi y el Palazzo della Torre dell'Orologio.

Piazza del Popolo, Rávena

Basilica de Sant'Apollinare in Classe (UNESCO)

Te recomendamos incluir en las cosas que ver en Rávena, la Basilica de Sant'Apollinare in Classe, a pesar de estar a unos 8 kilómetros de la ciudad. Es el mayor ejemplo de basílica paleocristiana y uno de los ocho monumentos Patrimonio de la Humanidad.

Fue mandado construir por el obispo Ursicinus y su consagración fue en el año 549. Su fachada es sencilla, pero su luminoso interior te dejará con la boca abierta. Está compuesto de tres naves separadas por 24 columnas griegas de mármol con capiteles bizantinos y frescos de los obispos y arzobispos de Rávena.

Pero sin duda lo que más llamará tu atención es el mosaico que cubren la cúpula del ábside, uno de los más grandes que ha llegado a nuestros días.

El personaje central es San Apolinar rodeado de 12 corderos simbolizando a los apóstoles. Sobre él, una gran cruz con piedras preciosas y el rostro de Cristo en el centro, y en los laterales, Moisés y Elías.

Alrededor de la cúpula hay más mosaicos que merece la pena ver con calma, por nombrar algunas representaciones, veremos entre las ventanas a los cuatro obispos fundadores de las principales basílicas de Rávena: Ursicinus, Bear, Severus y Ecclesius.

Basilica de Sant'Apollinare in Classe, Rávena

Basilica de Sant'Apollinare in Classe, Rávena

Basilica de Sant'Apollinare in Classe, Rávena

Mausoleo de Teodorico (UNESCO)

También a las afueras de Rávena se encuentra el Mausoleo de Teodorico, uno de los pocos de los ostrogodos que quedan en pie en Italia.

Es un edificio robusto mandado construir por el rey ostrogodo Teodorico en el 520 para ser su sepulcro (murió 6 años después).

Su aspecto externo parece ser que fue diferente y que se encontraba adornado con esculturas, que desaparecerían tras la reconversión de templo arriano a ortodoxo.

Debido a las inundaciones de la zona del siglo XVIII la parte inferior quedó enterrada y se utilizaba como capilla la superior, con el nombre de Santa María Rotonda. En 1844 comenzaron las excavaciones para dejar al descubierto el piso inferior y se hallaron numerosas tumbas.

Qué ver en Rávena, Mausoleo de Teodorico

Información práctica antes de tu visita a Rávena


ZTL, Zona de Tráfico limitado

Recuerda que la mayoría de las ciudades italianas tienen zona ZTL y solo se puede acceder al centro con permiso. Por eso nosotros, a pesar de que puedes aparcar en alguno de sus aparcamientos y solicitar el permiso, aparcamos siempre fuera de esta zona y caminamos hasta el centro. Te contamos todo sobre la ZTL en este post.


🎫 Billete conjunto

Hay muchos monumentos en Ravena cuya visita es individual, pero 5 de los más interesantes se encuentran agrupados en un billete conjunto que sale a cuenta.

El billete completo cuesta 10,50 €, es válido para 7 días y con él se puede visitar:

Basílica de San Vitale, Basílica de Sant'Apollinare Nuevo, Museo Arzobispal (Capilla de Sant'Andrea y Silla de Marfil), Baptisterio de Neonian y el Mausoleo de Galla Placidia.


Mapa de los lugares más interesantes que ver en Rávena


Dónde dormir

En Rávena tienen muchísimos lugares perfectos para alojarte, nosotros siempre confiamos en Booking, la aplicación es muy cómoda e intuitiva y puedes comparar por precios, calidades y ubicaciones.

Dormimos en el Exclusive Aparthotel La Reunion situado muy cerca de la tumba de Dante Alighieri. Ofrece suites independientes con conexión Wi-Fi gratuita y TV de pantalla plana, aire acondicionado y zona de cocina totalmente equipada. Una relación calidad precio estupenda.

Nuestra visita a la ciudad termina aquí, estas han sido las principales cosas que ver en Rávena, un itinerario intenso, pero como habrás podido ver con lugares imprescindibles. Estamos preparando un post hablando en profundidad de los monumentos incluidos en el patrimonio mundial de la UNESCO, suscríbete para ser el primero en leerlo.

¿Has estado alguna vez en Rávena? ¿Has visitado alguno de estos sitios? ¡Háznoslo saber en los comentarios!