Hoy te queremos enseñar qué ver en Tubingen (Tubinga), una preciosa ciudad del estado de Baden-Württemberg, al sur de Alemania.
Su colorido casco histórico situado a orillas del río Neckar y rodeado de colinas frondosas es de visita obligada en el país. Y es que la ciudad no puede ser más pintoresca con sus calles empedradas, casas de entramado de madera, antiguas iglesias y un castillo en lo alto de la colina.
Además, su historia cultural es muy rica, ya que posee una de las universidades más antiguas de Alemania que data de 1477. ¡Acompáñanos a descubrir la ciudad! ¡Te va a conquistar!
Dónde está Tubingen
Esta es la ubicación de Tubingen. Está situada en el estado federado de Baden-Wurtemberg en Alemania, y pertenece a la región de Neckar-Alb y a la región metropolitana europea de Stuttgart.
Qué ver en Tubingen
El casco antiguo de la ciudad es muy compacto, por lo que es fácil explorarlo a pie sin perderse ningún detalle interesante. Al final te hemos preparado un mapa en el que está todo lo que ver en Tubingen para que así no te pierdas nada importante.
Eberhardsbrücke
Comenzamos la visita a la ciudad en uno de los lugares más pintorescos de entre todo lo que ver en Tubingen, el Eberhardsbrück. Es también conocido como Neckarbrücke, y es un precioso puente repleto de flores que atraviesa el río Neckar dando paso al casco histórico de la ciudad.
Su nombre nombre hace referencia al conde Eberhard im Bart, el fundador de la universidad de Tubingen.
Desde uno de sus lados podemos contemplar el Platanenallee, una frondosa isla repleta de plátanos de indias, perfecta para pasear.
Puedes dar un paseo por las tranquilas aguas del río Neckar en una de sus barquitas de remos o de pedales o incluso hacer paddle surf.
Neckarfront
Desde el puente también podrás contemplar la imagen más emblemática que ver en Tubingen, el Neckarfront. Es un conjunto de edificios residenciales que se asoman al río y que te van a enamorar. Las casas con la torre de la colegiata al fondo es uno de los lugares más fotografiados de la ciudad.
Colegiata de St. George
Nos adentramos en la ciudad para comenzar a ver las maravillas que encierra y nos vamos directos a ver la Colegiata de St George.
Fue construida entre 1440 y 1529 por orden del conde Eberhard im-Bart, del que te hablaremos varias veces en este post. Fue la primera de la ciudad en convertirse en protestante, aunque muchos elementos católicos siguen decorándola.
En la animada plaza delantera de la colegiata puedes ver la Georgsbrunnen, una de las fuentes más bonitas que ver en Tubingen. En ella se encuentra la imagen de San Jorge matando al dragón. Fue creada en 1523, aunque realmente esta es una réplica de 1976.
Desde la plaza Holzmarkt puedes ver en la fachada de la colegiata una ventana redonda con la representación de San Jorge siendo lacerado por una rueda, así fue torturado por orden del Emperador Diocleciano.
La colegiata es de estilo gótico tardío y está compuesta por tres naves con capillas laterales y triforio. Varias cosas nos llamaron la atención en su amplio interior, una de ellas fueron las vidrieras diseñadas por Peter Hemmel de Andlau. Otra el tríptico del altar mayor de 1520 obra de Hans Schäufelin, alumno de Durero, en el que están representadas varias escenas de Cristo.
Tras el coro alto se encuentra un espacio con los sepulcros de Eberhard I, Duque de Württemberg, y su familia. Cada uno de ellos son verdaderas obras de arte, dedícale tiempo porque merece la pena verlas con calma.
Una de las mejores cosas que hacer en el interior de la colegiata es subir los 350 escalones de su torre, desde arriba las vistas a Tubinga no pueden ser más espectaculares.
Konviktsbibliothek Wilhelm I
En nuestro paseo nos encontramos con un edificio renacentista de 1592 que lleva el nombre del rey Wilhelm I de Württemberg, quien en 1817 estableció un seminario y una facultad de teología católica en la universidad. Es una parte del antiguo monasterio de Wilhelmsstift que se disolvió en 1535.
El interior acoge la Konviktsbibliothek, la biblioteca del seminario, que cuenta con más de 300000 volúmenes, siendo una de las bibliotecas de seminarios más grandes de Alemania. Tiene cinco instalaciones separadas y cuatro bibliotecas independientes.
Johanneskirche
El siguiente de los templos que ver en Tubingen es la Johanneskirche, construida entre 1875 y 1878, y uno de los ejemplos más importantes de arquitectura neogótica de la ciudad.
En el antiguo estado de Württemberg, la expansión católica produjo una mezcla religiosa entre la población y tras el establecimiento de la Facultad de Teología Católica en la Universidad de Tübingen en 1817, nació la primera comunidad católica en la ciudad después de la Reforma.
Stadtmuseum
Nos llamó mucho la atención el edificio en el que está alojado el Stadmuseum. Es el Kornhaus, un granero de 500 años de antigüedad con entramado de madera en el que se vendía grano en el sótano, y en los pisos superiores se realizaban eventos sociales.
Tras diferentes usos a lo largo de su historia, en 1991 el granero se convirtió en museo de la ciudad, en el que hay exhibiciones de los 900 años de su historia y una exposición sobre la artista de la silueta Lotte Reiniger.
Fruchtkasten
Otro precioso edificio de entramado de madera que nos encontramos en nuestro paseo por la ciudad es el Fruchtkasten, o caja de frutas, construido en 1474.
En él se almacenaban productos agrícolas, especialmente los cereales y sobre todo lúpulo. En 1770 se usó como escuela y en el 2003 se reformó para acoger la oficina de Registro de Ciudadanos de la ciudad.
Saint Jacobs Church
Tübingen es punto de paso del Camino de Santiago por eso se construyó esta iglesia de origen románico alrededor del año 1200 y que en 1500 se reformó en estilo gótico.
Burgsteige
Pasamos por la Bursteige, una de las calles más bonitas que ver en Tubingen, y que como su nombre indica, conduce hasta el castillo. En algunas de las casas puedes ver su año de construcción, entre los siglos XV y XVI.
En la casa nº 7 hay dos placas conmemorativa, una de ellas indica que en ella vivió Michael Maestlin, astrónomo y maestro de Kepler, y la otra que en 1550 se imprimieron los primeros Abecedarium y Catecismos traducidos al esloveno Primus Truber.
Castillo de Hohentübingen
Y sin duda el edificio más emblemático que ver en Tubingen es el castillo de Hohentübingen, que se encuentra en la zona más elevada de la ciudad.
Se mencionó por primera vez en 1078 como castrum twingia, aunque el castillo-palacio que vemos en la actualidad se comenzó en el siglo XII, terminándose en el XVI.
Este edificio renacentista tiene cuatro alas con torres redondas en las esquinas, y en él vivieron los Señores de Tübingen, elevados al rango de Condes del Palatinado en el siglo XII, hasta que vendieron el castillo y la ciudad a los Condes de Württemberg en 1342.
La universidad de Tubinga se hizo cargo de parte del palacio a mediados del siglo XVIII, y acabó siendo trasferido en su totalidad por el rey Guillermo I de Württemberg.
La entrada es un bello arco triunfal de 1607, una obra maestra del renacimiento tardío, que te conduce a las diferentes estancias. Alberga numerosas instituciones y colecciones de la Universidad de Tübingen entre ellas el Museo de la Universidad, con el Instituto de Prehistoria e Historia Temprana, Arqueología Clásica, trabajos de Numismática y egiptología.
Puedes pasear por el complejo libremente y admirar las excelentes vistas de toda la ciudad desde allí arriba.
Marktplatz
Nos encantó la Markplatz, que está rodeada por bellos edificios de fachadas medievales, la mayoría de los siglos XV y XVI, con animados bares y restaurantes con terrazas en los bajos.
En ella se realizan los mercados semanales durante todo el año, fiestas y diferentes eventos como uno de los más esperados por los habitantes de la ciudad, el Festival del chocolate de Tübingen.
Destaca el Ayuntamiento de Tübingen, un bellísimo edificio de mediados del siglo XV y cuatro niveles. En su fachada esgrafiada puedes ver entre otras decoraciones maravillosas, su bello balcón y el reloj astronómico. El reloj es de 1511 y muestra con sus tres agujas (sol, luna y dragón) la fecha, las fases de la luna y eclipses solares y lunares.
La planta baja albergaba el almacén municipal de sal y una zona porticada donde vendían carniceros y panaderos en la Edad Media. En el gran salón del primer piso, los curtidores hacían sus ventas para los curtidores.
La plaza está adornada por la Neptunbrunnen (fuente de Neptuno) de 1617, obra de Heinrich Schickhard y punto de reunión de los ciudadanos, así que olvídate de hacer una foto sin gente.
Mapa con todo lo que ver en Tubingen
Vídeo
Dónde comer
Comimos en el Neckarmüller beer garden, situado a un lado del Eberhardsbrücke (el puente del que te hablamos al principio. Es un enorme restaurante en el que podrás degustar los platos típicos alemanes más deliciosos.
Tiene un montón de espacios diferentes, tanto en el interior como en el exterior y cuenta además de un gran jardín con mesas a orillas del Neckar. Super recomendable la comida, a buen precio y el servicio rápido a pesar de la cantidad de gente que allí había.
Dónde dormir
Dormimos en el Hotel Am Schloss Superior, situado en la calle de subida al castillo Hohentübingen, y que cuenta con unas excelentes vistas al casco antiguo. Además tiene restaurante que sirve comida tradicional de Suabia. Todas las habitaciones tienen diseño distinto, y cuentan con TV por cable, baño privado y wifi.
Y ahora ya sabes que ver en Tubingen o Tubinga, o como prefieras llamarlo. A nosotros nos pareció una ciudad realmente bonita con mucho que hacer y con un ambiente universitario estupendo. ¿La conoces?
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